ONG’s internacionales demandan su liberación y la de otros defensores de derechos humanos encarcelados

Ciudad de México.- La ONG Front Line Defenders, dio a conocer que el 14 de octubre de 2019, el defensor de derechos humanos catalán Jordi Cuixart, fue declarado culpable de sedición y condenado a 9 años de prisión.
Recuerda que Jordi Cuixart fue arrestado poco después de haber promovido públicamente una protesta pacífica en Cataluña el 20 de septiembre de 2019, así como el referéndum por la independencia de Cataluña del 1 de octubre de 2019.
Destaca que Jordi Cuixart permanecía en prisión preventiva desde su arresto el 16 de octubre de 2017.
Jordi Cuixart es el presidente de Òmnium Cultural, una organización no gubernamental creada en 1961 en respuesta a la censura y persecución que enfrentó la cultura catalana durante la dictadura de Franco.
Además de trabajar para apoyar y preservar la lengua y patrimonio cultural de Cataluña, Òmnium Cultural ha participado activamente en la promoción y defensa de los derechos humanos en Cataluña.
La organización ha ayudado a organizar una serie de manifestaciones pacíficas para defender el derecho de las personas en Cataluña a una autodeterminación libre y democrática.
El 21 de marzo de 2018, cuatro meses después de que su caso se uniese al de otras 13 personas acusadas, Jordi Cuixart fue imputado por delito de «sedición» por el magistrado instructor del Tribunal Supremo.
Fue acusado de hacer campaña activamente a favor del referéndum de independencia de Cataluña celebrado el 1 de octubre de 2017, que había sido suspendido por el Tribunal Constitucional.
La acusación se basa principalmente en que Jordi Cuixart organizó las protestas del 20 de septiembre de 2017 ante la Conselleria de Economía de Cataluña, que intentaban impedir una operación policial, relacionada con el referéndum y ordenada judicialmente, en varios edificios público.
Antes de que se produjeran las protestas, Jordi Cuixart había hecho particularmente hincapié a través de publicaciones en redes sociales y otras plataformas, sobre el carácter pacífico de las movilizaciones.
Grabaciones de vídeo muestran al defensor de derechos humanos de pie sobre un vehículo policial durante las protestas tratando de calmar y disolver a una multitud enérgica que protestaba contra la detención de los/as organizadores/as del referéndum.
Front Line Defenders subraya que el 14 de octubre de 2019, la Sala Segunda del Tribunal Supremo español condenó a nueve líderes catalanes, entre ellos el defensor de derechos humanos Jordi Cuixart, a penas de prisión de hasta 13 años por sedición y otros delitos.
Destaca que El Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria halló que siete de los/as líderes catalanes/as fueron detenidos/as arbitrariamente, entre ellos Jordi Cuixart, e instó a España a liberar a aquellas personas que permanecían detenidas.
“Como declara International Trial Watch, FIDH y Euromed Rights, el proceso judicial presenta numerosas irregularidades y vulneraciones del derecho a un juicio justo. Amnistía Internacional, OMCT, relatores especiales de las Naciones Unidas y el Consejo de Europa también han mostrado su preocupación por el caso de Jordi Cuixart y han instado a las autoridades españolas a liberarlo”, expone la organización.
Por lo anterior, Front Line Defenders condena enérgicamente la condena por sedición contra el defensor de derechos humanos Jordi Cuixart, ya que considera que es resultado de su actividad legítima y pacífica de defensa de derechos humanos.
Ante estos hechos, Front Line Defenders insta a las autoridades en España a que:
-Anulen inmediatamente la condena y liberen a Jordi Cuixart, ya que supone que está únicamente motivada por su legítima y pacífica labor en la defensa de los derechos a la libertad de reunión pacífica y expresión;
-Garanticen que todos/as los/as defensores/as de derechos humanos en España puedan llevar a cabo sus actividades legítimas de derechos humanos en cualquier circunstancia sin temor a represalias y libres de cualquier limitación, entre ellas el acoso judicial y la criminalización.